El silencio, siempre invade la estancia en la que poco a poco van apareciendo los derviches.
Van vestidos con túnicas blancas, cubiertas por capas negras y tocados con altos gorros de fieltro (el "sikke").
Cada una de estas prendas simbolizan lo siguiente:
La túnica blanca es la mortaja.
La capa negra es la tumba.
Y el gorro simboliza la lápida.
El ritual comienza con una lectura del Corán. Lentamente, los derviches, dan tres vueltas a la sala; tres vueltas que simblolizan las tres etapas que llevan a Dios: el camino de la Ciencia, el camino de la Intuición y el camino del Amor. Luego, dejando caer sus capas negras, aparecen luminosamente blancos. Como almas inmaculadas que son, se ponen lentamente a girar, con la mano derecha eleveda hacia el cielo para recibir la gracia de Dios y la izquierda vuelta hacia la tierra, para transmitir esa gracia al mundo y a la gente.
Los derviches llegan a girar a gran velocidad, de 20 a 30 giros por minuto. El secreto de realizar tantos giros sin problemas (sin marearse por ejemplo) está en la figura del Dedé, el maestro, que supervisa a los derviches para conseguir dar vueltas sincronizadas.
Sin duda alguna, una experiencia única tanto para el que lo realiza cómo el que lo ve. El espectador se siente hechizado entre los cánticos y las vueltas de los derviches.
En Egipto también existen derviches, estos más coloristas y espectaculares (si cabe) que sus primos turcos, pero sin duda alguna con la misma mística que envuelve todo el ritual.
7 comentarios:
Cuando estuve en Egipto, presencie una actuación en directo de los derviches y me gusto muchísimo. Recuerdo que fue una velada magnífica ya que la actuación tuvo lugar en un barco que navegaba por el NIlo a su paso por El Cairo. Un beso.
En mi primer viaje presencié también una actuación en el barco, pero no tiene nada que ver. Es bonito pero más turisco. En cambio, el año pasado fuimos hasta Khan El Khalili para ver el espectáculo gratuito que ofrecen los derviches Taonura y fue magnífico verlos a todos. Cómo tocaban los instrumentos y cómo escenificaban sus coreografías. Al final 2 de ellos giraban. vamos, que pueden hacer más cosas que girar (que ya es bastante!). Hubo un músico, el que tocaba los zaggats (los crótalos) que me enamoró. Cómo se movía al son de la música, que alegría desprendía....Un día hablaré de los derviches egipcios.
Besitos!
Me encantó esta entrada, es tan mágica!! Una vez tuve la oportunidad de presenciar un número de derviche y quedé hipnotizada!! besitos y ya de regreso tras la semana santa!!
Yo he visto en directo un par de veces a Ana Saada hacer el giro sufi y fue fantástico lo que me transmitió.
Ninfa, la palabra es esa "hipnotico" y reconozco que alguna lagrimilla se me escapó. Fue tan bonito!.Espero que hayas tenido unos días tranquilos :-)
Nejsret, no me extraña. Ana Saeeda sabe a adaptarse perfectamente a cada estilo que interpreta. Cosa que no es fácil!
Besos para las dos
Gracias por tu comentario Asmahan!
no solo en España, sino tambien en Chile!!!
hasta ahora son pocas las Academias que incluyen danza arabe para hombres tambien, aunque ya va en aumento, ojala en España puedan hacer alguna iniciativa al respecto!
ya haré un post referente al tema a proposito de esto y de tu post de los derviches, es muy interesante!
un abrazo para ti!
Verlos en directo IMPRESIONA :-)
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